Por Salvaturismovigo.com
Publicado 21-02-2022
Playa tailandesa
Tailandia es un país extraordinario: templos budistas, hinduístas (dada su influencia hindú), playas de agua cristalina, un fondo marino extraordinario y una riqueza gastronómica para chuparse los dedos.
Suena bien, ¿verdad? No obstante, aunque este paraíso asiático tiene todo con lo que un turista puede soñar, hay que andarse con mucho ojo con los timos, ya que el que os exponemos a continuación casi todos los que viajamos a Tailandia lo hemos vivido, algunos de mejor manera que otros.
"El Gran Palacio de Bangkok está ya cerrado" Si oyes esta frase, ¡huye! Este es el timo más común en la capital tailandesa. Ésta puede salir en dos bocas distintas: una, de la del propio taxista para ir hasta el palacio. Éste os dirá que justo ese día (no importa si es lunes, martes, sábado…) está cerrado, pero que os puede llevar a otros templos igual de interesantes. La otra opción es que, una vez hayas llegado al Palacio de Bangkok veas que una de sus puertas está cerrada (es muy grande, no todas están cerradas) y se te acerque un "amable" tailandés para decirte que está cerrado pero que con su tuk tuk puede acercarte hasta otros templos o ¡ojo con este otro timo! a un mercado de diamantes y joyas preciosas donde, casualmente, ese día está todo mucho más barato.
El Gran Palacio de Bangkok
El primer timo no es tan grave, sino fuera por la pérdida de tiempo, ya que en muchos casos igual sólo dispones de ese día para ver el Palacio de Bangkok. La razón por la que todos se ponen de acuerdo (todos) para mal informarte de que el palacio está cerrado no es otra que para conseguir más clientes en su tuk tuk. El segundo timo, no obstante, es algo más peligroso. Durante el trayecto a ver los otros templos algunos conductores paran a los turistas en un mercado de piedras preciosas asegurándoles que son todas originales y que están mucho más baratas que en Europa. Aunque este timo parece increíblemente difícil de creérselo, os aseguramos que hemos visto más de un turista estafado con él. Como uno no tiene ni idea de piedras preciosas, la calidad te parece aceptable. Además, ellos mismos tienen cebos de tailandeses interesados en comprarlas dado que el precio no es muy elevado. Por supuesto, todo esto es falso, tanto como que el palacio está cerrado. ¡Mucho cuidado! Porque aunque no lleves efectivo, aceptan tarjetas de crédito.
El resto de timos no sólo se pueden ver en Tailandia, sino que se pueden vivir en el sur asiático en general. Por ejemplo, el precio de los taxis. La mayoría de los taxistas se niegan a poner el taxímetro, por lo que aunque os ofrezcan un precio cerrado que os parezca razonable, os están timando. A veces incluso son sinceros y te dicen que te cobran un poquito más porque cobra muy poco de su empresa y necesita alimentar a su familia. Sea la excusa que sea, os recomendamos que sólo subáis en taxis con taxímetro.
Atención también a los puestos ambulantes o a las pequeñas tiendas, donde si no controlas muy bien la moneda lo más seguro es que intenten darte mal el cambio. Lo mejor es tener bien claro a cuánto está el baht en ese momento y su equivalencia en euros para poder calcular los precios.
Con todo ello no queremos asustaros si tenéis pensado VIAJAR A TAILANDIA en realidad los tailandeses son muy hospitalarios, el problema es que intentan aprovecharse del turismo. El mejor consejo que podemos daros es que intentéis evitar las conversaciones con la "gente maja" que esté merodeando por los templos y lugares más turísticos. No hace falta ser bordes pero os aseguramos que en más de cinco minutos hablando con ellos os liarán.
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